sábado, 5 de enero de 2008

La religión y sus instituciones.

·



A lo largo de la historia, se ha podido comprobar la capacidad de movilización que profesa la Fe religiosa sobre las personas. La necesidad de creer en algo supremo ha sido una constante desde que surgió la humanidad como tal y esas creencias, se fueron extendiendo a lo largo del planeta y el tiempo, unas veces por iniciativa y otras por imposición.

La carencia de un conocimiento de nuestro entorno, sumado a las preguntas existenciales planteadas por los humanos (muchas de ellas aun sin respuesta), fueron un buen caldo de cultivo para desarrollar doctrinas que ayudaran a entender mejor el contexto en el que vivían.

El problema de toda religión, surgió en el momento en que sus máximos dirigentes se percataron de la capacidad de control y manipulación que podía ejercer una creencia divina sobre sus devotos. Fue entonces, cuando las instituciones religiosas empezaron a emerger como grandes protectores de su moral.

A parir de aquí, ya sabemos… Cruzadas, Guerra Santa, Inquisición… Y por supuesto, el sometimiento de la mujer al dominio de los poderes masculinos, que en muchos casos venía determinado por la interpretación de ciertos textos sagrados. El control practicado por las instituciones religiosas no ha sido tanto por el hombre, y en cambio, si por su propio mantenimiento en el poder. Aún hoy en día se puede observar esto en la jerarquía religiosa, y si no, veamos la última manifestación por la familia en Madrid.

Los humanos somos capaces de hacer cosas increíbles en nombre de la Fe. La mayor parte de la moral que profesa cualquier religión, es a todas luces, una buena manera para poder convivir los unos con los otros. El concepto de la Fe y su poder de acción, bien utilizados, es uno de los mayores tesoros que tenemos.

Por lo tanto, creo que sería de menester separar por un lado, la aportación positiva que puede tener la Religión sobre las personas, y por otro, la capacidad de sus Instituciones para manipular a sus fieles en beneficio propio.

6 comentarios:

Anónimo dijo...
6 de enero de 2008, 18:38  

Després de llegir aquest article, m´adono que jo ja hem vaig casar amb Tú des del primer dia que vaig tornar d´OZ. Un petonàs. MCA

Robert dijo...
6 de enero de 2008, 19:30  

La presencia difusa del poder en las relaciones humanas, sociales y políticas hace que conscientemente o no tanto, la persona quede poseida por la tentación de su uso, amenaza constante a unas relaciones horizontales.

El nivel de consciencia que las iglesias hayan tenido en el control de las convicciones, actitudes y conductas puede haber sido también fruto primero de otras motivaciones más nobles, por ejemplo, en una búsqueda sincera de la verdad, aunque, es cierto, el consecuente gusto del ejercicio de esa actividad, de ese rol, por los efectos colaterales que tiene para la propia autoestima, para la vanidad, para la necesidad de dar un significado a la propia existencia, por la necesidad de congruencia cognitiva con las ideas rectoras de esas acciones, por el sentimiento de inclusión de una élite dirigente y sobre todo, propiciado por el reconocimiento excesivo de los seguidores, de los fieles, esos líderes se acaban de convencer completamente de sus "propios aciertos" lo que propiciará el mantenimiento, continuidad de esos logros tan exitosos.

Hay que proceder, personalmente, siempre, a una meditación y reflexión rigurosa, periódica pero frecuente sobre en qué medida cada uno caemos en el uso del poder en nuestras relaciones e incluso sobre los condicionamientos estructurales que nos conducen a ello. Ese análisis debería abarcar los gestos, las palabras y los pensamientos para verificar que todos ellos son congruentes con nuestros valores originarios con los que hemos comprometido nuestras vidas.
RR. 6 enero 2008

Anónimo dijo...
6 de enero de 2008, 21:06  

Propongo y sumo con un nuevo debate: "La Ciencia y sus Instituciones". MCA

Anónimo dijo...
6 de enero de 2008, 22:25  

"Si un té massa vida...potser no cal que faci un doctorat" Conrad

Anónimo dijo...
7 de enero de 2008, 4:08  

Me preocupan las generalizaciones. Quizás por un excesivo rigor lingüístico me resisto a usar mucho los plurales cuando quiero calificar a alguien…hablar de “las” religiones, “los” curas, “la” jerarquía (toda) me provoca eso. Quizás acepto más hablar de “la” Iglesia Española y su rol como actor político, aunque ni eso se puede…es bien sabido que la conferencia episcopal española tiene sus roces internos, sobre todo con “la” Iglesia Catalana un poco más vanguardista. En el saco de hablar de “las” religiones cae todo dentro y eso oscurece la capacidad comprensiva del fenómeno.
En eso de “las” religiones caen manifestaciones de todo tipo: desde los fundamentalistas de todos los colores hasta los curas de Montserrat, un ejemplo de erudición y contribucion cultural a Cataluña (sin mencionar lo central que fue su aporte para salvar vidas a pesar de Franco); caen también los movimentos e iglesias cristianas latinoamericanas, que supliendo el rol de estados incompetentes y ausentes generan oportunidades de desarrollo a personas en situación de pobreza, sacan de la inmudicia a prostitutas viejas, cuando ya nadie las recibe, generan espacios dignos y eficientes de rehabilitación de drogas, y un largo etcétera.

Otra cosa que me preocupa es la palabra “manipulación”, tan usada en el producto audiovisual (de formato documental) Zeitgeist. Cierto, no se pueden negar las estructuras de poder, tampoco los intereses y las posiciones. Pero el ser humano es inteligente y yo apuesto por ello.

Asumir que hay instituciones que tienen un fin manipulativo y les resulta tal manejo de las personas, implica que éstas tienen una masa mórbida y fácil a su disposición. Esto, ya dicho y re dicho por los exponentes de la Escuela de Frankfurt, parte de la base de que los poderosos usan los medios de comunicación, las iglesias, todo lo que tengan a su alcance para como causa – efecto (al mas puro estilo conductista) lograr sus objetivos personales. Para estos teóricos las personas son seres débiles y vulnerales, aislados psicológicamente, sin recursos para descifrar los mensajes…en resumen, se lo creen todo.
Sin embargo, está demostrado que las personas no nos dejamos manipular tan fácilmte. Lo que verdaderamente influye son las redes y los puntos de referencia, las personas a las que admiramos y que en una interacción cara a cara nos iluminan para interpetar la realidad de acuerdo a los valores que nos hacen sentido.

¿La masa que acudió a la manifestaciñon de Madrid fue manipulada? No lo creo. Aunque yo no fui y no habría ido a tal manifestación, debo – aunque me duela – reconocer que esa manifestación es la muestra de la cultura católica española, que ha relegado el cristianismo a ámbitos de moral personal y que son capaces de manifestarse públicamente para hacer valer su peso en la opinion publica. Puede que no lo comparta, pero están en su derecho.

Ultimo tema que me preocupa: el rol de la mujer. La mujer ha sido subyugada no sólo en las religiones, sino en todas las instituciones sin excepción. Las religiones fueron y son una manifestación cultural más de la injusticia e ignorancia histórica.
Sin embargo, no hay que olvidar que no es el marxismo el que devuelve en el discurso y en la práctica la dignidad e igualdad a las personas, sino el cristianismo, al cual la cultura occidental debe toda su tradicion en el respeto por los derechos humanos.
Por suerte eso esta en algunos sitios cambiando, las iglesias cristianas ya tienen obispas y la iglesia católica mucho más atrás (años luz) al menos ha ido nombando mujeres en cargos altos del vaticano.

Anónimo dijo...
7 de enero de 2008, 7:00  

Celebro el debate...y más con este entusiasmo. En breve os contesto, Descartes se interpone en nuestro camino, el examen es el Jueves...Un cordial saludo.
Un gran beso para MCA.

visitas del día

Suscripción vía email

Introduce tu email:

Translate


Label Cloud

Échale un vistazo

Frase del dia

¿Como se genera dinero?